30.12.06

la verdad no es mimética

Llovía. Salí a la calle a sentir las gotas. Heladas. En un charco busqué mi reflejo, acribillado por las gotas de agua - violentas, grises -. Era como un espejo roto; un espejo improvisado rompiendose infinitamente, astillándose sin llegar a quebrarse. Pensé: mi biografía.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

hermosa imagen....

Anónimo dijo...

hace tiempo que leo tu blog, escribis cosas hermosas, este post me encantó, sublime!!!!

Debret Viana dijo...

liss, flor, se agradece.