19.5.07

Apología del fragmento



Dice Michael Haneke:
“La fragmentación es la única forma de abordar un tema con sinceridad”.

Nuestra propia humanidad nos niega las totalidades: somos finitos, estamos condenados a un solo sitio del presente, y estamos forzados a interrumpir la vigilia con períodos de inconsciencia que llamamos descanso o sueño. El fragmento es el único discurso al que podemos creerle: acomete una historia desde su evanescencia, detiene, unos instantes, algunos rasgos de la resbalosa verdad. Todo lo demás, es ficción (mejor o peor contada).
*

(Una cosa más sobre Haneke.
Cabe comentar, al margen, que a Debret Viana todavía le enfurecen ciertas tristes confusiones de la estructura cultural (el canon, la doxa, etc). Siente que es menos horrible que un artista no sea percibido, y habite su tiempo aislado en las periferias, que un otario que garabatea un mamarracho sea divinizado por las academias y audencias. Teniendo en cuenta los 71 fragmentos de una cronología del azar, de Haneke, Elephant, de Van Sant, no puede empezar a ser considera más que un trivial ejercicio de una mentalidad pasiva.)

1 comentario:

Enigma dijo...

... nadie esta mas vivo que cuando deja que su inconciente salga a traves de los sueños, la conciencia, es una carcel de oro.

Saludos

El Enigma
Nox atra cava circumvolat umbra